A 24 horas de que terminen unas votaciones cruciales en Podemos que determinarán qué reglas del juego se aplican en el congreso de la formación, las 'pablistas' o las 'errejonistas', los líderes de ambas corrientes se esforzaron este lunes en restar importancia a la confrontación internaconfrontación interna y vender las bondades de que en una organización política "se construya la unidad discutiendo". Sin embargo, las diferencias entre ambos son tales que Pablo Iglesias evitó confirmar la continuidad de Íñigo Errejón como número dos, en la secretaría política.
A primera hora, en una entrevista en Telecinco, el líder de Podemos afirmó que “habría que estar loco para prescindir de una figura” como la de Errejón, pero se limitó a señalar que él lo quiere tener "cerquita", "a su lado, no frente" a él y que le "encanta" su trabajo como portavoz parlamentario. Después, en un acto junto a Miguel Urban, líder de la corriente anticapitalista, que no esconde su deseo de que en el congreso se barajen nuevos nombres para la secretaría política, como el de la andaluza Teresa Rodríguez, Iglesias aseveró que “hay que acabar con los números unos, los doses y los treses” y especialmente con el “Podemos de las dos caras”. En este sentido, apostó por su continuidad “simplemente” como secretario general, pero rodeado de muchos compañeros en una dirección “más coral”.
EL NÚMERO DOS, “DE PASO”
Errejón, por su parte, desempeñó este el papel de dirigente humilde y sin miedo a ser laminado. Así, coincidió con Iglesias en que Podemos debe encaminarse hacia un "organización más abierta, que no dependa de un portavoz o dos" y admitió que, si sus tesis no triunfan en Vistalegre II, "él estará donde sea más útil" porque en su partido todos están "de paso". Asimismo, insistió en que no prevé disputar a Iglesias la secretaría general.
En este contexto, Rodríguez se autodescartó como número dos mientras el secretario de organización, Pablo Echenique, criticó que los anticapitalistas por “lanzar caras un poquito demasiado pronto".
EL DEBATE EN TORNO A LAS REGLAS DEL JUEGO
Más allá de las caras, Iglesias y Errejón continuaron con su campaña a favor de sus respetivos modelos congresuales, que elegirán las bases y simpatizantes de la formación en una votación hasta el martes. Los errejonistas defienden que el proyecto político se vote de manera diferente a las listas, con la vista puesta en que si gana su estrategia, luego Iglesias tenga que aplicarla, sin necesidad de disputar la secretaria general. Sin embargo, el líder de Podemos defiende una votación conjunta, para minar así la posibilidades de Errejón.
"No concibo que se vote a la gente porque te caiga bien y no porque se está de acuerdo con las ideas", insistió Iglesias. Asimismo acusó "a los compañeros de Errejón" de defender un "sistema personalista" mientras que él aboga por un modelo "más proporcional" y que "protege a las minorías".
Errejón, por su parte, defendió su propuesta como un sistema más “descentralizado, plural y proporcional” que el de Iglesias. El jueves se conocerán los resultados de la votación y, por tanto, como queda el primer 'round' entre ambos contrincantes antes de la batalla final, que previsiblemente tendrá lugar en Vistalegre II, si antes no llegan a un acuerdo.