DE VUELTA A LAS URNAS

El PP extrema todavía más la disyuntiva entre Rajoy o el caos

Los populares colocan al mismo nivel de "frivolidad" e "inexperiencia" a sus tres rivales

El líder del PP, Mariano Rajoy, este martes en un acto electoral en Almería.  / EFE/Carlos Barba

El PP exhibió este martes satisfacción por la resistencia mostrada por su líder, Mariano Rajoy, ante el triple ataque que sus rivales le profirieron en el debate a cuatro. El candidato conservador salió vivo de una cita difícil, que en diciembre prefirió evitar y que en esta ocasión asumió con desgana. Obviamente, los populares dieron al presidente en funciones como ganador, y él mismo utilizó la confrontación televisiva para machacar en torno a la idea de que el 26-J se puede optar por la “estabilidad, certidumbre y seriedad” que ofrece el PP, o bien por el “ruido”, el “desorden” o las meras “ensoñaciones” envueltas en “eslóganes” o “planteamientos de puro márketing” que representan el resto.

Se trata de la clásica dualidad entre Rajoy o el caos que los conservadores llevan planteando en sucesivas campañas, pero alimentada con lo sucedido en el debate. Esta estrategia aparca por el momento la intención de poner en foco en los peligros que traen consigo la “radicalidad” de Podemos, y sitúa a Pedro SánchezPablo Iglesias y Albert Rivera prácticamente al mismo nivel. El portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando, los describió de hecho como un “zombi”, un “Heidi con coleta” que oculta que es un “viejo comunista” y un “veleta” peligroso por su alianza con el PSOE, respectivamente.

Mariano Rajoy

CaNDIDATO DEL pp

"La frivolidad, los inventos de última hora y las palabras que no significan nada no son útiles para atender a los ciudadanos"

Todo ello ante Rajoy en un acto en Almería, provincia en la que el líder conservador retomó su agenda con la vista puesta en recuperar el escaño que el PP perdió por 300 votos frente a Podemos en los últimos comicios. “Si uno no va a las urnas, al final vienen los otros”, advirtió Hernando, tras corear, junto al resto de dirigentes populares andaluces, que Rajoy demostró en la cita televisiva ser el presidente “que merece España”. 

ESPAÑA, UNA "GRAN NACIÓN" 

El jefe del Ejecutivo no se amilanó ante los piropos –que le llegaron también en sus paseos por Almería y Granada- y aseveró que el debate dejó claro que “en España hay un proyecto en marcha para consolidar la recuperación y seguir creando empleo”, el de su partido, y en frente solo hay “frivolidad”, “inventos de última hora” o “chascarrillos de personas que no han gestionado un euro”. 

Así, tal como también hizo en la disputa a cuatro, trató de explotar su veteranía frente a dirigentes ‘amateurs’ y describió a España como una “gran nación” que es despreciada por los “cenizos” de sus rivales.