La CUP ha esgrimido este miércoles en el Parlament los motivos por los que no retirará su enmieda a la totalidad a los presupuestos del Govern. Y, vía su diputada Eulàlia Reguant, ha incidido de nuevo en el asunto de la desobediencia al Estado y la ruptura con este. "Los presupuestos tenían que ser una señal de firmeza, de que el proceso independentistas va en serio. Y son una claudicación ante Cristóbal Montoro", ha recalcado.

Reguant ha afirmado que, por ejemplo, la aceptación del límite de déficit fiscal que fija el Estado para las autonomías, este año del 0,7%, supone "una vejación política".Todo ello repercute en que, a juicio de la CUP, estos presupuestos no hagan nada por aumentar la base social del independentismo, por no realizar un esfuerzo aún mayor en políticas sociales.

Con todo, Reguant ha insistido en que nada se rompe, por su parte, con respecto a Junts pel Sí. "Los acuerdos mutan", ha aseverado, antes de recordar que el propio Carles Puigdemont (al que no ha citado) dijo hace unos meses que "con una prórroga presupuestaria se pueden hacer cosas".

La diputada ha emplazado a Junts pel Sí a trabajar ya para alcanzar un acuerdo para los presupuestos del 2017, siguiendo la línea "de las últimas semanas", es decir, a los preacuerdos alcanzados, según siempre los anticapitalistas, por el 'president' con Benet Salellas este fin de semana

"Nosotros y Junts pel Sí somos dos fuerzas distintas. Y tenemos un punto en común, que es la independencia y la ruptura con España", ha dicho Reguant, quien ha querido desmentir también el tópico de que la ley más importante a aprobar por un Gobierno son los presupeustos anuales. "La ley más importante de esta legislatura será la de transitoriedad jurídica", la que, 'de facto', será una especie de declaración velada de independencia. "Allí, como en la ley de creación de la seguridad social catalana (que ya ha entrado en el registro), encontrarán a al CUP" , ha sentenciado Reguant.