Puedes declarar hoy mismo la independencia pero no sirve de nada si ningún Estado (y especialmente los poderosos) te reconoce. Bien lo saben Palestina o Kosovo. Por esto internacionalizar la causa catalana será el gran reto del exeurodiputado Raül Romeva al frente de la 'conselleria' de Afers Exteriors i Relacions Institucionals.
Este departamento de nueva creación intentará contraponer la red de oficinas exteriores del Diplocat y la experiencia de Romeva y Amadeu Altafaj (representante permanente del Govern ante la UE) a la maquinaria de la diplomacia española. No será fácil. El ministro José Manuel García-Margallo ha conseguido que ningún país defienda los anhelo independentistas de Catalunya. No solo eso. Además de las reiteradas advertencias del presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y su predecesor, Durao Barroso, de que Catalunya quedaría fuera de la UE, Margallo logró que David Cameron recordara a Mas que debía cumplir la legalidad y que Barack Obama y Angela Merkel se posicionaran a favor de la unidad de España.