El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha visto interrumpido durante varios minutos el acto previo al inicio de la campaña catalana por un gruo de militantes animalistas, que le han impedido hablar durante varios minutos a los gritos de "No al Toro de la Vega" y "Todos somos iguales". Sánchez ha recordado que su partido presentó una ley contra el maltrato animal y ha emplazado a la veintena de manifestantes a debatir sus quejas a la salida. Allí, durante una conversación acalorada, Sánchez ha insistido en que el alcalde de Tordesillas, militante socialista, "no representa al partido" con su defensa del festejo tradicional en el que se maltrata y sacrifica un animal y "no defiende" la postura del partido.
"Hace un año me comprometí a llevar al Congreso una ley contra el maltrato animal, que entendemos que no está regulado conunos mínimos comunes en todas las comunidades autónomas. Esa ley fue rechazada por la mayoría absoluta del PP pero la llevaré en el programa electoral y cuando haya una mayoría socialista en el Congreso de los Diputados habrá una ley contra el maltrato animal", ha sostenido Sánchez, quien ha sostenido que esa ley hará que un acto comoel de Tordesillas "no será posible".