El futuro de la izquierda

Garzón hace un llamamiento a Podemos para concurrir juntos

El candidato de IU se ofrece a no liderar la lista y a que no aparezcan las siglas de la coalición

El partido lila rechaza la propuesta y dice que competirá con su propia marca

El candidato a la presidencia del Gobierno de IU, Alberto Garzón, ayer. / EFE/ JUAN M. ESPINOSA

«Allí donde se han construido candidaturas de unidad popular, se ha podido ganar a la derecha». Con este argumento como baza principal, Alberto Garzón hizo un llamamiento el viernes a Podemos para que tome nota «de lo que ha dicho la gente» y acepte que la fuerza lila, IU y el resto de partidos de izquierda que quieran sumarse concurran juntos a las  generales. Sin complejo de inferioridad y sabiendo que ahora sí cuenta con el respaldo mayoritario de Izquierda Unida -la reunión de la presidencia federal arropó con un 91% su propuesta-, Garzón aseguró que se va a «dejar la piel» en el intento de conformar una lista de «unidad popular» que contribuya a «desalojar» a Mariano Rajoy de la Moncloa.

Para vencer las resistencias de Podemos, el candidato a la presidencia del Gobierno se mostró dispuesto a hacer dos renuncias de calado: que las siglas de la coalición no aparezcan en las papeletas y que él no encabece la lista. Para ello, aceptó medir sus fuerzas en primarias con Pablo Iglesias u otros.

Eso sí, ante el temor de la vieja guardia a que la organización tradicionalmente referente en la izquierda sea absorbida por Podemos, el diputado malagueño aseguró, primero en rueda de prensa y después en la reunión interna, que la coalición «no va a desaparecer ni se va a diluir». Su ofrecimiento consiste, según dijo, en sumar «desde la cooperación» y no que una organización «subordine al resto». «No vamos a ir en una candidatura paraguas» y cuya marca sea Podemos, señaló, en referencia al último ofrecimiento de Iglesias para que su partido, «con sus siglas y con su nombre, sea un paraguas que sume» al resto.

El rechazo de Podemos

Garzón se mostró convencido de que Iglesias «va a saber leer el momento político». Sin embargo, el líder de Podemos opina que «el futuro no pasa por coaliciones» ni su fuerza va a ser «balsa de salvamento para nadie». Y más allá de sus palabras, los estatutos de su partido marcan una línea roja: solo pueden concurrir en «unidad popular» en las elecciones locales. Fuentes de Podemos aseveraron el viernes que no tienen intención de modificarlos y que competirán con su marca en las generales.

Pese a ello, Garzón anunció que a partir de la semana próxima mantendrá encuentros públicos con Iglesias y otros líderes para «expandir lo que han significado Ahora Madrid o Barcelona en Comú».

El apoyo del coordinardor

Cayo Lara, por su parte, confirmó que ha dejado atrás sus recelos iniciales al respaldar, ante la reunión de la presidencia federal, a Garzón y las candidaturas unitarias. «Nadie por sí solo es palanca de cambio», señaló en referencia a Podemos. Eso sí, el aún coordinador de IU defendió que cualquier proceso de convergencia sea haga siempre bajo las condiciones de «respeto, negociación y democracia para que las bases opinen».

Lara recogió así el guante lanzado por Gaspar Llamazares, líder de la corriente Izquierda Abierta, quien ha reclamado que cualquier decisión final sea sometida a referéndum entre la militancia. El coordinador de IU mostró además su acercamiento a Garzón al respaldar que de forma «urgente» la dirección actúe en Madrid, una de las federaciones menos proclives a la convergencia. Tras meses de encontronazos, IU se plantea desfederalizarlos o imponer una gestora.