Combatientes del Estado Islámico (EI) se han rendido este lunes ante el grupo rival Ejército del Islam y otras facciones afines tras los choques que se desencadenaron anoche en una zona al sur de Damasco, según activistas y fuentes rebeldes.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha informado de que los yihadistas se entregaron a sus adversarios en el pueblo de Yalda, en la periferia sur de la capital, que les prometieron que serían presentados ante un tribunal islámico y que no les humillarían.
Los extremistas se rindieron después de que estallaran choques entre ambos bandos la pasada madrugada. Un portavoz del Ejército del Islam, Abu Huzaifa, ha dicho que unos sesenta milicianos del EI se han doblegado después de que fueran cercados por su grupo y otras facciones. Abu Huzaifa ha añadido que su organización mató, además, a cincuenta militantes del EI durante los combates.
Califato a la fuerza
Los enfrentamientos entre el EI y otros islamistas comenzaron en la periferia de Damasco a finales de junio, tras varios asesinatos y dos atentados con coches bomba que los rebeldes sirios atribuyeron a los extremistas.
El mes pasado el EI proclamó un califato islámico en Irak y Siria, tras avanzar sobre el terreno. Según el Observatorio, este grupo domina el 35% del territorio sirio tras tomar amplias áreas de la provincia de Deir al Zur y otras regiones.