Unos cincuenta miembros de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) han creado el grupo Essència con el objetivo de protegerla si el Estado "ejecuta la tentación" de ilegalizarla o pretende atacar a su presidenta, Carme Forcadell. La portavoz del colectivo, Raquel Torres, ha subrayado, en la presentación del mismo, que su objetivo es "preparar" a la ANC "ante posibles ataques políticos" tras la denuncia del seudosindicato Manos Limpias, que pidió al fiscal general del Estado que ilegalice a la entidad.
Manos Limpias denunció a la ANC y a Forcadell por los presuntos delitos de asociación ilícita, proposición a la sedición y malversación de fondos públicos. La entidad no ve "amenazas reales" por parte del "aparato" del Estado para ilegalizar la ANC, ha apuntado Torres, pero sí "tentaciones por la capacidad y potencia de la asamblea" para defender el proceso soberanista catalán. Según ha avanzado, la ANC tiene una "estrategia" para seguir existiendo en caso de que se la ilegalice.
"Defenderemos a la presidenta y a cualquier miembro de la ANC que se pueda ver comprometido por su militancia política independentista", ha dicho Torres. Essència ha elaborado un decálogo para blindar a la entidad, basado en su independencia política: "El Secretariado Nacional (SN) nunca puede estar condicionado por estamentos políticos ni proyectos personales", sostiene el documento. "Este movimiento [la ANC] no se parará hasta que los catalanes puedan ejercer el derecho de autodeterminación", avisaTorres.