CiU volvería a ser la fuerza con más escaños en el Parlament y estos son algunos factores para intentar descifrar por qué. Uno: el 12 de diciembre, el president Artur Mas anunció el acuerdo con ERC, ICV-EUiA y la CUP sobre la fecha y las preguntas de la consulta de autodeterminación. Cumplía así con un punto de su programa electoral (pero aún está por ver si habrá referendo el 9 de noviembre) y satisfacía el contrato societario con una Esquerra que ha exprimido prácticamente del todo la fuga de votos convergentes. Dos: en aras del diálogo y pese al muro de PP y PSOE, los partidos soberanistas registraron en febrero una solicitud al Congreso para que permita a la Generalitat convocar la consulta. Tres: el llamado proceso catalán atraviesa en las últimas semanas una etapa más de llano, con menos tensión que en otros momentos. Y cuatro: dicen los gobernantes que sus medidas están dando frutos, que la crisis remite, y algunos ciudadanos empiezan a creérselo.
Así lo constatan los datos del último Barómetro Político de Catalunya elaborado por el Gabinet d’Estudis Socials i d’Opinió Pública (GESOP), que sitúa a CiU con entre 35 y 36 escaños, seguido de ERC, con 34 o 35. En tercer lugar, Ciutadans, con 17 o 18 parlamentarios, seguido de ICV-EUiA, con entre 14 y 15, los mismos que el PSC. El PP se quedaría con 12 o 13 escaños y la CUP doblaría su actual representación y llegaría a 6 diputados.