Matas dice que pidió trabajo para su mujer "como haría cualquier padre de familia"

El expresidente de Baleares niega que sobornara al hotelero Miquel Ramis a cambio de contratar a Maite Areal

El expresidente del Gobierno balear Jaume Matas declara, hace un año, en la Audiencia de Palma. / EFE / MONTSERRAT T. DÍEZ

El expresidente de Baleares Jaume Matas ha admitido este lunes que a finales del 2006 pidió al hotelero mallorquín Miquel Ramis que contratase a su mujer "como haría cualquier padre de familia: ir a un amigo y pedirle trabajo". De esta forma ha rebatido las acusaciones de la Fiscalía, a cargo de Pedro Horrach, que sostiene que Matas se aprovechó de su cargo y exigió al empresario que contratase a Maite Areal a cambio de una suma de dinero. La cifra aproximada es de más de 2.900 euros mensuales, que presuntamente Ramis le debía abonar hasta un total de 42.111 euros.

En la declaración realizada este lunes ante el tribunal encargado de juzgarle por un presunto delito de cohecho, Matas ha asegurado que tenía "una gran confianza" con el hotelero ya que cada año celebraban "matanzas juntos", Areal iba con Ramis en barco y todos solian pasar "Nocheviejas juntos". Además ha añadido que el hotel era "el de referencia para el PP" y que en el se celebraban numerosos actos del partido. No obstante, ha precisado que el hotelero "nunca" le pidió nada a cambio y ha insistido en que Ramis "es un empresario de éxito y sus hoteles son de lo mejor que hay en Mallorca". Matas también ha admitido que el sueldo lo propuso él a partir de la cifra económica que había cobrado su mujer en la empresa anterior, donde había sido "despedida".

Comprometido, no presionado

El hotelero mallorquín también ha declarado este lunes en los juzgados. Miquel Ramis ha asegurado que no sabia qué trabajo hacia Areal en su empresa, alegando que no hace "un seguimiento de cada empleado". Según el empresario, después de que "su amigo" Matas le pidiese trabajo para su esposa, se sintió "comprometido" pero no "presionado", por lo que ofreció a Areal el lugar de relaciones públicas. No obstante, ha reconocido que no "necesitaba" un empleado e incluso ha agregado que no sabe si el trabajo de la mujer de Matas resultó "útil".

Desde entonces, Ramis asignó "un sueldo y sitio" y dejó que "los directores" supervisaran el trabajo de Areal. El hotelero ha confirmado la versión de Matas al decir que ambas familias se encontraban frecuentemente "en actos y comidas" y ha añadido que la mujer del exmandatario balear le contaba "con qué clientes había contactado". No obstante, cuando el fiscal le ha preguntado el nombre de dichos clientes, el hotelero ha respondido que no lo sabía. La indignación de Horrach ha sido evidente al espetarle como respuesta: "¿De qué me habla? ¿Contrata a alguien para hacer de relaciones públicas y no sabe con quién? ¿De qué me habla?". A lo que Ramis ha respondido: "Hablo de lo mío".

El Ministerio Público reclama a Matas una multa de 1.000 euros y el comiso de la cantidad que habría recibido como prebenda.