La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha tachado el acuerdo entre CiU y ERC de "pacto de inestabilidad". Los catalanes fueron, en su opinión, "muy claros" en las urnas y pidieron que todas las administraciones "trabajaran unidas frente a la crisis". Por contra, la unión entre Artur Mas y Oriol Junqueras "va en la dirección contraria" y no generará "estabilidad" ni "certidumbre".
"Mas va de error en error", ha declarado en los pasillos del Congreso la número dos del Gobierno. Sáenz de Santamaría ha añadido que Mas "no se garantiza la estabilidad", sino que está dando pasos hacia la "inestabilidad" que a su juicio es "lo que menos necesitan los catalanes".
La vicepresidenta ha recordado, además, que la consulta pactada para 2014 "no es legal" y que el ordenamiento jurídico español "tiene muchos mecanismos para frenarla".
La dirigente del PPC, Alícia Sánchez Camacho, ha declarado en el Congreso que el acuerdo "va a perjudicar la economía catalana y a los catalanes". Sánchez Camacho opina que el pacto se ha logrado porque Mas "quiere mantener el poder" y Junqueras aspira a que Catalunya se "separe de España". La política conservadora ha explicado que le pide a Mariano Rajoy "diálogo, firmeza y cumplimiento del Estado de derecho".
LA OPINIÓN DEL PSOE
En la misma línea, la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, ha dejado claro que su partido no ve con buenos ojos un pacto que, según los socialistas, está "más pensado en los intereses" de ERC y CiU y sus propios dirigentes "que en las necesidades de los catalanes".
"Pensamos que no va a poder ofrecer la estabilidad necesaria de un gobierno para afrontar los retos y las dificultades", ha concluido.