Visiblemente irritado por el modo en que transcurrió ayer la reunión delConsejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), el 'conseller' de Economia,Andreu Mas-Colell, ha lanzado esta mañana una advertencia alGobiernoespañol. "Que no se juegue con la posibilidad de unaintervenciónde Catalunya --ha señalado--, porque si eso se produjera pediríamos la interlocución deEuropa". En una entrevista en Catalunya Ràdio, Mas-Colell ha calificado de "fachenda" y "exhibicionista" la actitud que mostró el ministro de Hacienda, CristóbalMontoro, en la citada reunión delCPFF.
"No me hace temblar el señor Montoro", ha declarado el 'conseller', aludiendo a la amenaza que hizo el ministro de activar mecanismos disciplinarios contra ocho comunidades autónomas. Y más adelante ha apuntado que la Generalitat no desea ser "agente de precipitación" de una eventual intervención de la economía española por parte de la Unión Europea, porque ello no disminuiría "la presión sobre la hacienda de Catalunya". Sin embargo, ha querido dejar claro que si el Gobierno central tomara la decisión de intervenir Catalunya, laGeneralitatapelaría al "sentido de la responsabilidad" de Europa. Y ha añadido: "Llegado el caso, prefiero discutir con técnicos de Bruselas que de Madrid, porque aquellos no tienen los instintos centralistas que a menudo encuentras en los que provinen del Gobierno central".
Apenas unas horas después de la reunión del CPFF en la que Montoro impuso a las comunides autónomas un nuevo objetivo de déficit y atajó un conato de rebelión aludiendo a las dificultades de las autonomías para financiarse sin la ayuda del Estado, Mas-Colell se ha preguntado "si tiene algún sentido", seguir acudiendo a este tipo de encuentros. En la reunión de ayer, ha relatado, quedó claro que las comunidades son "marineros de segunda" en un barco en el que "el Estado es el capitán". "Nos tratan como a súbditos", ha insistido.
El 'conseller' se ha mostrado convencido de que al Gobierno central la presión sobre las comunidades autónomas "se le girará en contra", porque dará argumentos a Bruselas para utilizar la misma estrategia con el Estado español.