JUBILEO EN LA COLONIA

Picardo denuncia que Gibraltar se siente «hostigado» por España

El Gobierno reitera su malestar por la «inoportuna» visita del príncipe Eduardo

El príncipe Eduardo y el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, ayer, en un acto con escolares. / EFE / A. CARRASCO RAGEL

El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, aprovechó ayer la presencia en la colonia del príncipe Eduardo de Inglaterra para manifestar que el Peñón se siente «atacado y hostigado» por España. Picardo se quejó de este modo a los periodistas de la actuación de la Guardia Civil en el conflicto pesquero. «Entran en aguas de Gibraltar como si fuesen suyas», subrayó. El ministro principal también criticó la denuncia presentada por el Gobierno del PP ante la UE contra el nuevo régimen fiscal gibraltareño y aseguró que acudirá «a los tribunales» si es necesario.

Picardo hizo estas declaraciones instantes antes de que el príncipe Eduardo y su esposa colocaran la primera piedra del monumento que recordará el jubileo de diamantes de la reina Isabel II. Los condes de Wessex iniciaron ayer una visita de tres días a la colonia para conmemorar los 60 años de reinado de la monarca y el Gobierno de la colonia se ha esforzado por que la pareja sienta «lo fuerte que late el corazón británico» de los llanitos, destacó Picardo. Dio el día libre a los funcionarios de servicios no esenciales y cerró los colegios para ofrecer a la pareja su primer baño de multitudes en la plaza y la calle principal de la población.

Sin embargo, el viaje del hijo menor de Isabel II no es del agrado del Gobierno español, en pleno conflicto con el Peñón por el veto a los pescadores gaditanos, y lo calificó de «inoportuno». El Ministerio de Exteriores reiteró «la disconformidad y el malestar» del Ejecutivo y recordó que en mayo ya expresó su «disgusto» al embajador del Reino Unido en España, Giles Paxman.

NUEVA TERMINAL / Como consecuencia de las tensiones diplomáticas, la reina Sofía anuló su asistencia el pasado 18 de mayo a un almuerzo ofrecido en Londres por Isabel II con motivo del jubileo de diamantes a sugerencia del Gobierno, que consideraba «poco adecuada» su presencia allí. Una de las razones argumentadas por el Ejecutivo fue, precisamente, la visita del príncipe Eduardo y su esposa a Gibraltar.

El acto que más ampollas levanta tendrá lugar en el último momento. Justo antes de partir, los condes de Wessex inaugurarán la nueva terminal del aeropuerto, construida sobre el istmo que une Gibraltar con La Línea de la Concepción, un terreno que España considera que no estaba incluido en el Tratado de Utrech (1713), por el cual se cedía la soberanía de la Roca al Reino Unido.

El diputado del PP y alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, pidió que como gesto de «buena voluntad» no se inaugure el aeropuerto, y el subdelegado del Gobierno en Cádiz, Javier de Torre, consideró que con la nueva terminal se pone «otra piedra en el camino» en la negociación con los pescadores.