Adiós al terror

La salida de los presos será individualizada y durará años

El Gobierno puede acercar a los reclusos y flexibilizar las penas

Imagen de una reciente manifestación en San Sebastián contra la política penitenciaria del Gobierno. / EFE / JUAN HERRERO

ETA no se olvida de sus 703 presos en las cárceles españolas y europeas en el comunicado en el que anuncia el cese definitivo de la violencia. Sin embargo, la solución para los encarcelados no será global sino individualizada y se prolongará durante varios años, según fuentes jurídicas.

El Gobierno puede llevar a cabo un primer gesto al acordar el acercamiento de etarras a cárceles del País Vasco. En la actualidad, están recluidos en la prisión alavesa de Nanclares de Oca y en la de Navarra 38 internos. Desde 1989, a los etarras se les ha aplicado la política de dispersión para impedir que siguieran actuando como un colectivo a las órdenes de la banda criminal.

LAS POSIBILIDADES / En las cárceles españolas están recluidos 559 etarras, de los que 377 están clasificados en primer grado y solo pueden salir cinco horas al día de sus celdas. En segundo grado se encuentran 181 terroristas que disfrutan de permisos penitenciarios, como salidas de fin de semana o varios días al año.

Al tercer grado -que solo obliga al interno a dormir en prisión- se han acogido apenas cuatro etarras entre el 2007 y el 2010, uno de ellos por una enfermedad incurable.

Fuentes jurídicas han explicado que el Gobierno puede flexibilizar la política de grados de los internos y facilitar el acceso al tercer grado por motivos de salud. En cualquier caso, lo más probable es que siga exigiendo a los internos un escrito en el que afirmen que renuncian a la violencias y se disculpen con sus víctimas. Por último, el Gobierno dispone de otra posibilidad, el indulto, que solo podrá conceder de manera individualizada porque las leyes prohíben las amnistías y las medidas de gracia generalizadas.