SEGURIDAD Regular
Con la ordenanza el ayuntamiento ha tratado problemáticas y déficits sociales solo desde una perspectiva de problemas de orden público. No podemos caer en este error. La exclusión y las situaciones precarias generan tensión en los hogares y en la calle que precisan más políticas sociales y recursos adecuados.
CIVISMO Regular
Para fomentar el civismo es necesaria la implicación de todos los vecinos en las dinámicas de la comunidad y en los barrios, trabajando conjuntamente para la resolución de conflictos, para mejorar la convivencia, en equipamientos y en espacios de relación que respetan la diferencia.
BIENESTAR Mal
Las políticas no han priorizado a los niños, los jóvenes y las familias. La dificultad para acceder a una vivienda digna y el abandono prematuro del sistema educativo son algunas situaciones que se vinculan a la pobreza en la infancia y la adolescencia y que impiden huir de la herencia de la exclusión.
PROMOCIÓN Mal
En un momento en el que la tasa de paro de los menores de 25 años roza el 40% son necesarias acciones formativas y de inserción en los sectores que la ciudad impulsa, como el turismo, para promover oportunidades laborales. También reciclar y formar a personas vinculadas a la construcción.
TRANSPORTE Bien
Progresivamente los barrios más aislados se han ido conectado con el resto de la ciudad y el área metropolitana. Es muy adecuada la iniciativa de las tarjetas T-12 para los niños de 4 a 12 años, pero debería ampliarse hasta los 16, así como dar facilidades a todas aquellas personas que están en paro.