El vídeo de la Torre Mapfre y el Arts tenía más de dos años de antigüedad

El tribunal afirma que el vídeo intervenido a Mohamad Afzal de la Torre Mapfre y el Hotel Arts no permite concluir que el documental pudiera servir para planificar un atentado contra esos edificios. Para los jueces, esa prueba responde a la actividad de un turista al llegar a Barcelona en el 2001, más de dos años antes. En la grabación, este acusado aparece junto a un hombre no identificado.

Los magistrados afirman que la grabación impide a un observador que desconozca la zona situar los edificios, las zonas de recreo, la playa, el puerto o el paseo marítimo, y muchos menos los accesos y salidas. Además, el vídeo fue editado de manera rudimentaria, con frecuentes fundidos, y parece ser una especie de paseo de dos personas que discurren por la zona.