El historiador de arte Carlos Toribio ha recibido el encargo del Ayuntamiento de Parets del Vallès de redactar un estudio de carácter local sobre el mural que los artistas Eduardo Arranz Bravo y Rafael Bartolozzi pintaron entre 1969 y 1971 en la fachada de la antigua empresa Tipel, junto al puente de la autopista C-33.
Toribio, que ya había hecho un estudio previo para la revista del centro de estudios local ‘Parietes’, trabajará en un volumen mucho más amplio que se quiere presentar durante el año 2020.
El mural, de colores llamativos y dibujos surrealistas, está catalogado como bien cultural de interés local y está recogido en el Plan Especial de Protección del Patrimonio, aprobado por el Ayuntamiento en 2011. Se trata de una de las primeras obras conjuntas de estos artistas que causó un gran revuelo, ya que el franquismo lo consideró una provocación.
La voluntad de Parets es que el mural pueda ser visitado en el futuro dentro de las jornadas europeas de patrimonio que cada año se celebran en octubre. Paralelamente y coincidiendo con el 50 aniversario de la obra, también se presentará el libro.
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