Putin vuelve de la mano de Orriols

Los rusos son maestros en seguir la huella de la historia. El interés de Vladimir Putin por Catalunya responde a una tradición que comenzó con Macià intentando comprar armas en Moscú, en 1925, para su aventura de Prats de Molló; siguió con el protagonismo del cónsul soviético en Barcelona durante la guerra civil; pasó por la injerencia en la crisis del PSUC, en 1981; por los negocios de Prenafeta con Moscú tras la caída del muro, y tuvo su apogeo en el intento de aprovechar el 'totum revolutum' del' procés' para desestabilizar a Pedro Sánchez y la Unión Europea. Escaldado Carles Puigdemont por sus contactos con hombres de Putin e hibernado el 'procés', los rusos buscan un nuevo 'partner'. ¿Por què no Aliança Catalana, el partido independentista de extrema derecha que lidera Sílvia Orriols? Este es el significado último de la entrevista que sostuvo la semana pasada Pau Nadal, un enviado de Orriols, con Siegbert Droese, eurodiputado del partido neonazi Alternativa para Alemania (AfD).

¿Qué tiene que ver Putin en todo esto? Junto a Viktor Orbán, la AfD es el principal instrumento de Putin para acabar con la Unión Europea. El Kremlin la ha financiado y le ha ayudado a ganar elecciones en el este de Alemania. Hablar con un eurodiputado de la AfD es como hacerlo con alguien del antiguo KGB (del que Putin fue agente, precisamente, en la antigua República Democrática Alemana). ¿Qué otro sentido puede tener el encuentro? Orriols no aporta nada a los alemanes, y estos solo le prometieron cobijo en el más extremista de los eurogrupos si un día Aliança Catalana tiene escaño en Bruselas. Para Putin, supone volver a plantar una pica en Catalunya. Menor, pero el tiempo dirá. La reunión tuvo lugar en Bruselas y no creo que Droese acudiera con su Mercedes Benz particular, matriculado AH 1818. ¿Les suena A.H.? Así empiezan las placas de los nazis alemanes actuales. ¿Es consciente Sílvia Orriols del lío en el que le ha metido su mentor ideológico, Jordi Aragonès? 

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