Crispación Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Yo ya estoy harto

 Deberíamos ser más escépticos con los políticos, porque a muchos lo que más les importa es gobernar y vivir de ello

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se dirige desde el estrado del Congreso al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante un pleno. / / JOSÉ LUIS ROCA

Según un último estudio del CIS el 88,9 % de los españoles cree que hay demasiada crispación política en nuestro país. Ya llevamos muchos años que el ambiente político se ha vuelto irrespirable y empezamos a estar hartos de ver cómo se acusan, se insultan y se reprochan todo cuanto hacen. La figura ideal del político sería aquel que transmitiese calma, control, mucha serenidad y que diera la impresión de tener la solución a los problemas que nos afectan a todos. Un político debería ser alguien que, ante cualquier contingencia nacional, transmitiese capacidad de resolución y, sobre todo, capacidad de entendimiento con las fuerzas de la oposición; así, con empatía, aportaría soluciones para cada problema. Pero no, estamos viendo todo lo contrario. La política de hoy es un todos contra todos que se ha transmitido a la calle de manera preocupante.