La espiral de la libreta Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Entre el palacio de Kensington y Sanxenxo

Detractores y entusiastas de la monarquía coindicen en la escasa tolerabilidad a la mentira. Unas gotas de información sobre Kate Middleton habrían ahorrado nocivas conjeturas 

Nuevo escándalo en torno a Kate Middleton: intentan acceder a su historial médico

“No es Kate”: siguen las dudas sobre las supuestas primeras imágenes de la princesa de Gales

Kate Middleton / Tom Jenkins / REUTERS

Ahora resulta que Kate Middleton tiene una presunta doble. Ese potaje anda cociéndose en las redes sociales después de que el diario ‘The Sun’ publicase, el lunes, las imágenes extraídas de un vídeo donde los príncipes de Gales pasean juntos cerca de Adelaide Cottage, su residencia en Windsor. El gallinero digital conspira con que no es Kate. Impugna que haya adelgazado tanto e incluso que cargue con bolsas si acaba de someterse a una operación abdominal. Ya estamos otra vez, lío sobre lío, la espiral especulativa alimentada por el secretismo de la casa real británica. Tanto misterio suscita la ‘desaparición’ de la princesa que el paisano que grabó la supuesta exclusiva con su móvil se ha llevado una buena morterada de libras esterlinas. Mientras, el periódico ‘The Times’, monárquico de chistera y chaqué, especula con que la primera aparición oficial tendrá lugar el 31 de marzo. Domingo de Resurrección, por cierto.