El campo arde en su 15M particular -tan certeramente acuñado por nuestro director Albert Sáez-, un movimiento de protesta que viene de lejos. Lo sabemos bien quienes desde la niñez y por razones geográficas y familiares mantenemos vínculos fuertes y de por vida con el mundo agrícola. Duele que los políticos lo hayan puesto ahora en el centro de la agenda, con fines partidistas, porque las elecciones europeas se asoman ya por el espejo retrovisor. También indigna el maniqueísmo y el reduccionismo con el que se trata al campo, ese malo de la película, de pensamiento único, que solo vive de subvenciones.
Newsletter
El campo arde y con razón
Tractores en la Diagonal de Barcelona /
Lo más visto
- Tres de cada cuatro ascensores deberán reformarse en Catalunya en los próximos años
- ¿Cuándo tendré que reformar el ascensor? Plazos, trámites y motivos de la normativa que entra en vigor el 1 de julio
- El CIS coloca al PSOE cinco puntos por encima del PP en las elecciones europeas del 9-J
- Aglomeraciones en las puertas del hotel Mandarin Barcelona para ver a Zendaya y Ana de Armas
- Reino Unido: el Gobierno advierte a los ciudadanos de una posible catástrofe y les pide que preparen un kit de supervivencia