Limón & vinagre Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Margarita II de Dinamarca, la reina que fumaba y tenía seudónimo

Debe ser de las pocas reinas (quizás la única) que tiene un seudónimo (Ingahild Grathmer) que ha utilizado como escritora e ilustradora

Margarita II de Dinamarca se jubila: ¿por qué es la reina más 'cool' de Europa?

¿Ha abdicado la reina Margarita para salvar el matrimonio de su hijo tras los rumores de infidelidad?

La reina Margarita II de Dinamarca, el heredero Federico y la princesa heredera María saludan al cuerpo diplomático en Christiansborg / Photo by Ida Marie Odgaard / Ritzau Scanpix / AFP

Un grupo de jóvenes se citan en Odense para celebrar el Año Nuevo. Comen bacalao y ‘kransekage’, un pastel de mazapán en forma de abeto, y, para seguir la tradición, escuchan el discurso de la reina Margrethe, Margarita II, también conocida en la intimidad como Daisy. Es una tradición como las demás y al mismo tiempo un juego, incluso para las casas de apuestas. El año pasado, estos jóvenes estuvieron a punto de acertarla, pero como el danés de la reina tiene tendencias más bien arcaicas, no dijeron la palabra con exactitud. Este año nadie había apostado por 'abdicar', el verbo que utilizará Margarita en su última alocución anual. Nadie pensaba en ello, aunque la operación de espalda de febrero, como ella misma ha reconocido, fue el detonante de una decisión que se ha mantenido en secreto por mucho que ahora algunos medios digan que ya se percibían señales. La reina, cuando conmemoró sus 50 años en el trono, hace dos, recordó que el trabajo que le había sido encomendado (y al que tuvo acceso porque su padre, con tres hijas, movió cielos y tierra para abolir la ley sálica) era de tipo monacal y que el deber de ser reina se extendía hasta la muerte. Ha cambiado de opinión y ahora delega en su hijo Federico, que se llama como el abuelo y como el rey que hizo posible (porque murió sin descendencia) que la dinastía de los Oldemburgo diera paso a la casa de Glücksburg, que es la que, desde 1863, reina en Dinamarca, en Groenlandia y en las islas Feroe. Será el Federico número 10 y ya veremos cómo le van las cosas, porque antes y después de casarse con una plebeya australiana, Mary Donaldson, ha atesorado una larga lista de amigas, novias y amantes y unas cuantas noches de desenfreno y más de un encontronazo con la policía por infringir determinadas normas de comportamiento.