Décima avenida Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Israel y Palestina: ¿Por qué los dos estados son un autoengaño?

La creación de Palestina junto a Israel es inviable desde un punto de vista territorial, político y de equilibrio de fuerzas

Ilustración / Leonard Beard

La división entre palestinos e israelís, la partición de la tierra en disputa de modo que los dos pueblos coexistan sin convivir, ha sido tradicionalmente el motor de todas las iniciativas diplomáticas en la zona. En 1917, la Declaración Balfour (una declaración formal de apoyo del Gobierno británico al proyecto sionista en forma de carta del ministro de Exteriores, Arthur James Balfour, al barón Lionel Walter Rothschild) decía: “El Gobierno de Su Majestad contempla con beneplácito el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío (…), entendiéndose claramente que no se hará nada que pueda perjudicar los derechos civiles y religiosos de las comunidades no judías existentes en Palestina, o los derechos y el estatus político de los judíos en cualquier otro país”.