Le Fumoir Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Viernes, once y once de la noche

El país se estremece ante la posibilidad de réplicas mientras mira al cielo de reojo, pues, aunque es el suelo el que tiembla, es Dios el que parece enfadado

Efectos del terremoto que ha devastado Marruecos.

El viernes ocho, tarde, supimos del terremoto de Marruecos. Las desgracias suceden a menudo en viernes. Suceden de noche. Recuerdo aquella pesadilla de los atentados de París. También era viernes. También de noche. Una de noviembre bajo un tiempo magnífico, como de veranillo de San Miguel fuera de hora. Una soirée que se anunciaba plácida y se tornó horror. En Marruecos, la noche del ocho se hizo escombro.