Cara a cara sobre la 'superilla' Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Que la desmantelen, para vergüenza pública internacional

Fue un ataque ideológico contra Colau, no conceptual. Nunca la han tragado ni considerado que su elección democrática pudiese tener relevancia. Los que mandan en Barcelona, han sido y deben seguir siendo ellos

Cara a cara: moraleja de la sentencia de la 'superilla', por Gabriel Capilla

La plaza de Enric Granados con Consell de Cent. / JORDI OTIX

La sentencia debe ejecutarse. Hay que obedecer la ley. Las obras de derribo deben iniciarse inmediatamente y devolver Consell de Cent a una calle convencional. Esto es lo que se merecería el lobbi de comerciantes de Barcelona Oberta y Foment del Treball. Para que todo el mundo vea el calado de su iniciativa judicial, en contra del urbanismo humanizado. Y además se equivocan: los comercios, como es bien sabido, también van a salir beneficiados con esta reforma. Después del reconocimiento mundial que ha tenido la gestión urbanística del Ayuntamiento de Barcelona, felicitado incluso por la ONU como ejemplo a seguir, sería muy chocante ver portadas de diarios internacionales, que lo han alabado, explicando ahora su marcha atrás con excavadoras arrancando árboles. Barcelona, de vanguardista a la retaguardia.