Limón & vinagre Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Enríquez Negreira: fútbol de pago

Siete kilos le facturó al Barcelona. Por asesoramiento verbal, claro. El mundo es de los ágrafos que cobran por palabras. Nada por escrito

José María Enríquez Negreira, en una imagen de archivo. / ARCHIVO

Penalti. El Barcelona pagó 7 millones de euros a una empresa de José María Enríquez Negreira cuando este era vicepresidente de los árbitros españoles. Los pagos podrían remontarse al último año de la presidencia de Josep Lluís Núñez, aquel constructor de lágrima fácil en el palco que hubiera querido ser Pujol y que pese a hacer de paganini a Negreira vivió esa época en la que los títulos no llegaban ni a tiros. Ni a billetes. Los pagos los mantuvo Gaspart, al que los Reyes Magos le trajeron la presidencia del club. El más alto forofo que vieron los siglos. Pagó igualmente Joan Laporta, que después de comprobar que ganar una Champions es un objetivo más realista que la independencia, volvió a la casa azulgrana trayendo tras su aventura política más sabiduría. Y más barriga.