La crisis de la vivienda

Esas mujeres que viven de renta antigua en Barcelona

Mujer / Leonard Beard

Ada Colau ha comprado para Barcelona dos bloques de viviendas que destinará a vivienda social pero no puedo evitar fijar la atención en otra protagonista para esta historia que se llama  Lluïsa. Es una mujer mayor que ha logrado salvar su forma de vida o lo que queda de ella: podrá seguir viviendo en su casa, que paga con un alquiler de renta antigua. La renta antigua es un precio irrisorio tal y como están los precios de la vivienda, y te retrotrae a tiempos tan antiguos como el concepto, renta antigua, que evoca a la Antigüedad, algo valioso, que la nostalgia ha embellecido o que nos contamos de padres a hijos desde el inicio de los tiempos, como que hubo antes pesetas y céntimos, también reales… Solo que Lluïsa existe en nuestro tiempo real, casi como un ser  mitológico que ha sorteado victorioso las trampas de cada modernización que ha supuesto un encarecimiento de la vida. Te cruzarás con ella o alguien como ella, en la calle o en el supermercado, y donde solo ves una persona mayor algo encogida, frágil, hay pasillos que se hacen eternos, techos altos, habitaciones vacías.