GOLPE FRANCO

Pedri. Su nombre es Pedri

Pedri celebrando su gol junto a Ansu Fati / Sport/Javi Ferrandiz

El mejor del partido. ¿Y el Barça? Habría que preguntarse por qué los comentaristas son vencidos por la tentación de pensar que delante no juega nadie. ¿Cómo jugar si estás solo? No habría fútbol sino ensimismamiento. Pero el Barça jugaba esta tarde de sábado contra el Girona, que no sólo es un equipo bien hecho, sino que, además, le tiene ganas al Barcelona, como es natural. Tiene jugadores que proceden de la Masía y quieren volver, por supuesto, a su lugar de origen, esa cuna del fútbol de la que provienen genios o aspirantes. Esa procedencia es también un destino: no puedes jugar como te dé la gana (es decir, la desgana) sino que estás obligado por una rabia de origen, la que proviene de la vergüenza ética a la que aboca el buen fútbol: no perder ni la dignidad ni la pelota.