Artículo de Jordi Nieva-Fenoll Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Dejen en paz a los protagonistas del caso Dani Alves

Han bastado un nombre famoso, una discoteca también conocida y cuatro posibles filtraciones de auténticos indeseables para que muchos ansiosamente se pongan a defenderle o a desearle la horca

Un momento del traslado de Dani Alves en un furgón de los Mossos en la Ciutat de la Justícia de Barcelona. / ZOWY VOETEN

Pese a las ya bastantes series que enseñan que no se debe condenar ni creer sistemáticamente a nadie, ya tenemos otra vez un caso mediático en el que muchos, sin la más mínima información, se atreven a creer a Dani Alves o a su denunciante. Es asombroso lo lejos que se atreve la mayoría de la gente a llevar sus supuestos poderes intuitivos. Han bastado un nombre famoso, una discoteca también conocida y cuatro posibles filtraciones de auténticos indeseables relacionados con la investigación o el centro penitenciario en el que ha estado Alves, para que muchos ansiosamente se pongan a defenderle o a desearle la horca.