APUNTE

Malmeter, insultar, desprestigiar...

Òscar Grau y Bartomeu, en la ciudad deportiva del Barça. / Getty

Los whatsapp reproducidos por este diario son una ventana abierta a la pésima concepción que la anterior directiva tenia de los pesos pesados del Barça. También una ventana de par en par a la bajeza con que se llevaba el club y al clima insoportable de animadversión hacia tantos enemigos reales e imaginarios que se instaló en las oficinas barcelonistas.