Las atrocidades del grupo Wagner allanan que Rusia sea considerado Estado patrocinador del terrorismo

Ya no hay dudas. Yevgeny Prigozhin, apodado ‘el cocinero del Kremlin’, se ha convertido en la personalidad más influyente después del presidente ruso, Vladímir Putin, en todo lo que respecta a la guerra de Ucrania. Es el líder de la compañía militar privada Wagner (PMC), un Ejército privado que lucha en favor de los intereses del Kremlin en todo el mundo. Ha sido condecorado en dos ocasiones, e incluso fue galardonado con la estrella del Héroe de Rusia. Ahora se halla sancionado por EEUU, la UE y Australia, aunque ha dado a entender que las condenas internacionales le importan muy poco gracias a su poder en Moscú, que excede en mucho la autoridad de cualquier alto funcionario local. La principal creación de Prigozhin es el grupo Wagner, la milicia privada de mercenarios a la que se considera responsable de gravísimos crímenes de guerra en Ucrania, Siria y África, incluyendo la salvaje decapitación y mutilación filmada en vídeo de Mohamed al Ismail, un desertor sirio. De acuerdo con las leyes rusas, las compañías militares privadas son ilegales, pero este extremo es ignorado olímpicamente por el Ministerio de Defensa ruso, que incluso proporciona a Wagner aviones, blindados, tanques y hasta artillería. El episodio más audaz que ha protagonizado Prigozhin ha consistido en la ejecución extrajudicial del mercenario Yevgueni Nuzhin, un preso reclutado por Wagner en una cárcel rusa que, una vez en el frente de Ucrania, se cambió de bando, aunque acabó siendo devuelto a Rusia como parte de un intercambio de prisioneros. Fue asesinado con un martillo, en una terrible e impactante ejecución grabada en vídeo. Ante la posibilidad de que pudiera presentarse una acusación de asesinato ante la justicia de su país, Prigozhin comentó cínicamente lo siguiente: "Se inicia un caso penal en virtud del artículo 105 del Código Penal ruso en ausencia de un cadáver. Sin cuerpo, no hay caso", dijo el influyente personaje (en ruso, ‘netu tyela, netu dela’), vanagloriándose, sin molestarse siquiera en ocultarlo, de la impunidad de la que goza dentro de Rusia. Posteriormente, envió un martillo ensangrentado al Parlamento Europeo el día en que los eurodiputados votaron a favor de considerar a Rusia un Estado terrorista. Según una activista rusa de derechos humanos, Olga Romanova, CMP Wagner ya ha ejecutado al menos a 40 personas durante la guerra en Ucrania. En Rusia, el ascenso de este criminal reincidente se explica por su cercanía social con el presidente Vladimir Putin. Además, su preeminencia constituye toda una señal dirigida a Occidente de que semejantes comportamientos, más propios del crimen organizado que de un Estado civilizado, se han convertido en el modus operandi del país en el exterior. Se puede concluir que uno de los resultados de la agresión contra Ucrania ha sido la sustitución de las instituciones legítimas de poder por otras ilegales. Atributos de Estado Y es que Prigozhin ha creado una organización con los atributos formales de un Estado: un Ejército, finanzas e influencia política. El Gobierno ruso comparte de facto con Prigozhin y sus mercenarios el monopolio de la violencia y el derecho a impartir justicia. Un periodista ruso independiente, Aleksánder Nevzorov, considera a Prigozhin una figura de importancia federal, capaz de influir en los acontecimientos y las decisiones políticas del Gobierno. El medio ruso independiente Meduza advierte que las autoridades están preparando un proyecto político para Prigozhin, convirtiéndolo en una nueva estrella de la disfuncional estructura de partidos en Rusia. Hasta hace poco, EEUU y la UE evitaban el debate de reconocer o no a Rusia como un Estado patrocinador del terrorismo. Ahora la situación ha cambiado. El Parlamento Europeo y la Asamblea Parlamentaria de la OTAN ya se han pronunciado favorablemente al respecto, y otros actores importantes se están planteando cómo actuar. Una de las opciones sería tipificar en primer lugar al PMC Wagner como grupo terrorista a nivel de organizaciones internacionales informales. Ese paso podría darse en la plataforma Asociación Internacional del Código de Conducta (ICoCA), un foro mundial que evalúa el cumplimiento del derecho internacional humanitario por parte de las empresas de seguridad privada. Los expertos de ICoCA tienen el derecho legal de evaluar a los proveedores de servicios de seguridad bajo un Código acordado previamente. Y al fin y al cabo, originalmente, PMC Wagner era una compañía de seguridad. De acuerdo con la información disponible, la Asociación está dispuesta a declarar a la organización como organización terrorista. Este veredicto sería un marcador, una primera señal para la comunidad internacional, que allanaría el camino para adoptar paso similar con respecto al propio Estado ruso.

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La banda rusa de mercenarios, que actúa en África, Siria y Ucrania, emplea métodos del crimen organizado y ha llegado a ejecutar a un desertor a martillazos y a grabarlo en vídeo

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