Sombra ultra en la presidencia de la UE

La derecha celebra su victoria en las elecciones de Suecia.

La nueva presidencia semestral rotatoria de la Unión Europea (UE), que asumirá Suecia desde el próximo 1 de enero, estará condicionada por el partido euroescéptico de extrema derecha Demócratas de Suecia (SD). Pese a las declaraciones tranquilizadoras del primer ministro sueco, el conservador Ulf Kristersson, las posiciones de los ultraderechistas -de quienes depende la continuidad de su Gobierno- impedirán avanzar en el Pacto sobre Inmigración y Asilo de la UE, debilitarán la firmeza europea contra las derivas autoritarias de Hungría y Polonia y las restricciones a la libertad de prensa en Grecia y otros países, diluirán la ambición de las medidas para frenar el cambio climático y obstaculizarán nuevos progresos en la integración política europea.