Limón & vinagre, por Albert Soler Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Luis de la Fuente, empezar la faena con mal pie

En este país si caes mal no hay triunfo que haga de cambiar de opinión a tus detractores, y tenga por seguro que, si le ven caído junto a las tablas, saldrán decenas de voluntarios para el descabello

De la Fuente, en la presentación como nuevo seleccionador español. / Efe

Luis de la Fuente es de esos toreros a quienes les pilla el toro antes de salir al ruedo, esos que van con la cuadrilla a comprobar el morlaco que les ha tocado en suerte, y en un descuido reciben una cornada. No ha empezado todavía a entrenar a la selección, no ha dado ni siquiera a conocer la primera convocatoria, y ya le están atizando por declarar que le gustan los toros. Decir eso actualmente es casi tan peligroso como no convocar más que a dos jugadores del Real Madrid. Tanta es su afición que, en caso improbable de necesitar ir al barbero, y ante la tradicional pregunta del profesional de las tijeras, «¿fútbol o toros?», De la Fuente no sabría qué responder, se quedaría sin palabras. Para evitar encontrarse en tal tesitura, prefiere lucir calva, mejor quedarse sin pelo que sin palabras.