Artículo de Ernest Folch Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Messi, la herida abierta del Barça

Messi es un orgullo del Barça pero es un fracaso de Bartomeu y Laporta: el resultado es que el club se ha quedado sin su estandarte y sin poder capitalizar su victoria más importante

Messi

Messi es ya oficialmente el mejor jugador de la historia del fútbol y, en consecuencia, el icono mundial del deporte. Los barcelonistas ya lo sabíamos desde hace tiempo y no hacía falta ninguna Copa del Mundo para ratificar esta evidencia, pero en el resto del planeta, y especialmente en Madrid (donde siempre se intentó rebajar su trascendencia) y en Argentina (donde se le reprochaba que no había ganado un Mundial como Maradona), la conquista del campeonato erradica de golpe y para siempre todos los debates. Messi es por fin el rey indiscutible del olimpo del fútbol. Pero, desde el punto de vista del Barça, lo que debería haber sido una alegría y un orgullo inconmensurable para todos los ‘culés’, la consagración mundial de Messi deja sin embargo una sensación final de inevitable decepción. Ciertamente, la historia de Messi con el Barça empieza y se desarrolla como un cuento de hadas, con la apuesta que hizo el club cuando era niño para ayudarle en su crecimiento, y más tarde con la conquista de todos los títulos posibles: fue una maravillosa historia de amor, donde el Barça y Messi se lo dieron todo el uno al otro.