Artículo de Carles Francino Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

El canario de Torres

Los científicos se han desgañitado advirtiendo de que, si no cambiamos, vamos de cabeza al desastre

Viñedos de la familia Torres.

Miguel Torres tiene 81 años y la cabeza muy bien amueblada. Por eso hace tiempo que predica contra los peligros del cambio climático; porque sabe que esto va en serio y que el calor es la principal amenaza para la viña. Viticultor y bodeguero de cuarta generación, optó hace tiempo por comprar terrenos en zonas más elevadas de lo habitual -por lo tanto más frías- y no solo predica, también actúa: el 10% de los beneficios anuales de Bodegas Torres se invierte en mitigar el calentamiento global. Desde el uso de plantas fotovoltaicas hasta la captura del CO2 que se genera en la fermentación de la uva. Los resultados no suponen ninguna varita mágica para resolver un problema descomunal, pero sí cotizan en otro mercado de valores: el del compromiso con la salud del planeta.