Gárgolas | Artículo de Josep Maria Fonalleras Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Tiempos de ficción y de política en EEUU

Mientras me miraba 'The Good Fight' y pensaba que habían ido demasiado lejos en las hipótesis distópicas, tuve noticia del atentado contra el marido de Nacy Pelosi. Y pensé que no era tan lejana aquella tragedia

Nancy y Paul Pelosi en la gala Time 100 celebrada en el Lincoln Center de New York, en 2019. / AFP / ANGELA WEISS

'The Good Fight' es una serie de la cadena CBS que ahora se puede ver en Movistar. Es la secuela de otra ficción llamada 'The Good Wife', que estaba centrada en las idas y venidas de un bufete de abogados. Los casos a resolver, los juicios, los pactos, y, claro, las relaciones sentimentales y personales de los protagonistas. Hasta aquí, nada nuevo. En 'The Good Wife' ya había apuntes políticos (uno de los personajes lo era y veíamos su carrera electoral para ser gobernador), pero no dejaba de ser una serie convencional, aunque con una excelente factura. The Good Fight', con más atrevimiento formal (son capaces de detener el desarrollo de la historia para contar con dibujos animados la composición del Tribunal Supremo, pongamos por caso, o el porqué del paro de la administración americana o el funcionamiento de las 'fake news' en las redes), está hecha a partir de una premisa esencial: el vínculo con el presente más inmediato. Más allá de las rencillas jurídicas y del siempre presente conflicto racial, en sus seis temporadas ha habido referencias constantes a la subida al poder de Trump, al covid, y, por supuesto, al asalto al Capitolio, de enero de 2021. La pareja de la protagonista principal, la demócrata Diane Lockhart, es miembro y asesor de la NRA, la Asociación Nacional del Rifle, y parece tener información suficiente – y privilegiada – sobre ese día funesto.