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Trias y el futuro de Junts

Xavier Trias interviene en el Congreso Internacional de Movilidad, este martes en Sitges, junto a Pedro Nueno / Carlos Márquez Daniel

No ha sido una buena semana para Junts fuera del gobierno. Tras los envites del primer pleno, la pulsión autodestructiva que anida en la formación surgida en torno a Carles Puigdemont ha explotado ahora en la figura de Francesc de Dalmases, un individuo con una trayectoria que ningún partido cabal hubiera albergado en su seno. En 2017, el 'establisment' del antiguo PDECat dejó a Puigdemont en la estacada en unas elecciones que creyeron que perdería frente a Esquerra y el bloque del 155. Y su reacción fue rodearse de palmeros. A mayor intensidad en el aplauso en las redes, mejor puesto en la lista. Así llegaron a la política Torra, Borràs, Dalmases, Madaula, Eduard Pujol y algunos más. Durante estos cinco años, Puigdemont ha librado una batalla con los restos de lo que fue su partido a través los alfiles del partido que fundó. La lucha nunca es a cara descubierta. Porque los unos saben que sin Puigdemont ya no existirían y el otro aún recuerda que sin los unos nunca hubiera llegado donde está. Esta tensión subterránea se llevó por delante a Marta Pascal, a Quim Torra, a Elsa Artadi, a Jordi Sànchez y a tantos otros. Ahora, Puigdemont y los más antiguos del lugar juegan a bolos con la cabeza de Dalmases como calentamiento para hacerlo con la de Borràs. Todo el mundo dentro de este mundo da por hecho que, tras el abandono de las 'conselleries', habrá una escisión. La incógnita es si será individual o colectiva y de qué lado caerá Puigdemont.