Limón & vinagre Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Philippe Martínez, un sindicalista tachado de autoritario

Tal vez no conviene exagerar sobre los orígenes españoles de Phillipe Martínez. Ciertamente es hijo y nieto de españoles procedentes de Cantabria, pero más allá de la genética los efectos no parecen muy evidentes. Quizá la explicación está en las convicciones ideológicas

Philippe Martínez, durante las movilizaciones de este otoño en Francia. / EFE/CHRISTOPHE PETIT

Algunos bocazas insisten en que si Philippe Martínez, el secretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT), enarbola con ferocidad una subida del salario mínimo en Francia de hasta los 2.000 euros brutos mensuales –ahora mismo no llega a 1.700– es por puro desinterés, porque él cobra más de 6.000. Es posible. Pero a Martínez le queda poco de mandato. El próximo marzo abandonará la dirección de la organización sindical y ha dicho que volverá a su puesto de Renault, donde le quedarán un par de años para jubilarse. Ya se ha ofrecido a la empresa para mediar en cualquier conflicto interno. Lo absolutamente seguro es que no volverá a sentarse en un minúsculo despacho para hacer cálculos metalúrgicos.