Apunte

De Xavi a Gavi

Gavi, en acción, en el reciente partido de Liga frente al Celta / Jordi Cotrina

El ADN Barça. Cuando el primer equipo masculino está en apuros, o lo parece, siempre aparecen esas tres letras. Se recuerdan así las esencias de un estilo que ha dado grandes resultados y, sobre todo, un carácter que pasa de una generación a otra. Pero el día en que alguien descifre el genoma entero de ese ADN quizás entenderemos mejor la complejidad de ser culé. Sí, habrá el gen de la filosofía de Cruyff, que con los años ha visto varias mutaciones y casi siempre para mejorar, pero también un gen del culé pesimista y sufridor, del que se desanima en tres partidos; habrá otro que explique la mala suerte del Barça en los sorteos de la Champions... Y habrá, imagino, un gen que nos permite vivir en contradicción. Por ejemplo, ¿cómo se entiende que el Barça esté ahora mismo en crisis de juego y, en la última gala del Balón de Oro, muchos protagonistas vistan de blaugrana? Además del merecido Balón para Alexia Putellas, desfilaron el goleador Lewandowski y Gavi como mejor jugador joven, al lado de Pedri, que lo ganó hace un año.