“Inquiokupas”, “desokupaciones”, “alquiler okupa” han sido conceptos que hemos aprendido este verano. De nuevo, en algunos medios, historias diarias y terribles de gente a la que le 'okupan' la casa, y la sensación de que se multiplican. Con razón somos el cuarto país del mundo en número de alarmas.
Artículo de Montse Santolino Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos
Medios y miedos
Este verano, algunos jueces sensatos han empezado a denunciar lo que era obvio: que en el tema de las 'okupaciones' el periodismo irresponsable es una fuente de bulos
Asamblea de personas afines al movimiento ’okupa’ frente al conocido como banco expropiado’ de la calle Travessera de Gràcia -entonces blindado con paneles metálicos tras el primer desalojo-, el 29 de mayo del 2016. /
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