El desliz de Pilar Garcés Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

La primera ministra se menea

A los partidos nacionalpopulistas que representan las ideologías peores y a sus voceros no hay que darles un test de drogas cuando te lo piden, o te lo pedirán todos los días

La primera ministra finlandesa Sanna Marin. / Reuters

No veía un baile tan bueno al más alto nivel desde que el primer ministro David se marca una solitaria coreografía en 'Love Actually', ese peliculón. Como se recordará, Hugh Grant danza por el interior de Downing Street número 10 al ritmo de 'Jump (For My Love)' de The Pointer Sisters hasta que se topa con la hosca mirada de una de sus secretarias y la sesión de desenfrene tras una ardua jornada laboral acaba abruptamente. Por algo así, aunque con algo menos de 'flow', se acorraló a otro inquilino de la citada mansión, Boris Johnson, hace unos meses, cuando las fiestas estaban restringidas por leyes de su Gobierno. Cuestión de contexto.