Artículo de Ángeles González Sinde Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Calor, mentiras y cintas de vídeo

Por primera vez en mi vida, he tenido que dejar de ver los telediarios. Me angustiaban. Todo el verano se han sucedido las noticias catastróficas: incendios, sequías, pantanos vacíos, cosechas perdidas, olas de calor que se suceden por toda Europa

Andie Macdowell en una escena de ’Sexo, mentiras y cintas de vídeo’.

“Basura. Llevo toda la semana pensando en basura. No pienso en otra cosa. Me preocupa mucho. ¿Qué vamos a hacer con tantísima basura? Nos vamos a quedar sin sitios donde echarla”. Así arranca la película que le valió a Steven Soderbergh la Palma de Oro de Cannes en 1989, 'Sexo, mentiras y cintas de video'. Era su ópera prima. La escena tiene cierto tinte cómico: una mujer dulce y cándida que se sonroja cuando el terapeuta le pregunta si se masturba, tiene su angustia puesta en un tema medioambiental alejado de su día a día. Desde que la vi con 24 años muchas veces he recordado esos y otros diálogos. Este verano también. Aunque ya tengo 57 palos, he vivido lo mío y estamos en 2022, podría decir lo mismo que el joven personaje de Andie MacDowell a su psicoanalista y él me podría contestar también: “Usted se obsesiona con cosas sobre las que no tiene control”.