Debate ideológico

¿Qué proponen los defensores de la teoría económica del decrecimiento?

El economista Carlos Taibo divulga los postulados de la reducción de la producción y el consumo, pero insta también a la recuperación de la "vida social robada"

Billetes de 50 euros.

La polémica por la propuesta de ampliación del Aeropuerto de Barcelona reactivó este año las tesis de los apologetas del decrecimiento. El gestor aeroportuario Aena proponía invertir 1.700 millones de euros en la infraestructura para incrementar su capacidad hasta los 72 millones de pasajeros anuales, pero algunos colectivos e instituciones dudan de una inversión que iba a suponer la ocupación de espacios medioambientales (La Ricarda), restar actividad agrícola e incrementar las emisiones contaminantes. Javier Faus, presidente del Cercle de Economia, durante la presentación de apoyo al proyecto por parte de los empresarios, puso el énfasis en el elemento sociológico de mayor calado de la actual polémica. "No hemos de dejar que la apología del decrecimiento se apodere de la sociedad", dijo. La actual situación de inflación desbocada como consecuencia del alza de las materias primas y los combustibles (derivada de la invasión de Ucrania) mantiene tensa la discusión económica-ideológica del decrecimiento. ¿Hasta que punto es posible vivir en crecimiento constante cuando los recursos son limitados? ¿En momentos en los que el gap social aumenta y las dificultades crecen para los menos desfavorecidos tienen más lógica las políticas redistributivas? No existe una respuesta única. Para las posiciones enmarcadas en la derecha, en situaciones complicadas conviene mimar los medios de producción como motores de la actividad. Para la izquierda, las medidas de política económica deben abogar por la redistribución (subir impuestos a las rentas más altas, restar ganancias a los más exitosos para evitar el conflicto social con los más perjudicados por el contexto). Entre búsquedas de equilibrios renacen los apologetas del decrecimiento.