Artículo de Ana Bernal-Triviño Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

'En mi cuerpo mando yo'

Decir esa frase, en la prostitución, es una trampa. Porque cuando alguien paga por acceder a tu cuerpo, ya no haces lo que quieras con él

Prostitución en una carretera, en una imagen de archivo / RICARD CUGAT (ARCHIVO)

En muchas reflexiones sobre el debate de la prostitución se usa una frase, de forma repetida, cual comodín: “si las feministas decís con el aborto ‘en mi cuerpo mando yo’, ¿por qué no dejáis que las prostitutas decidan sobre su propio cuerpo?”. Que alguien en contra del aborto diga esto, se puede entender. Que se haga desde la izquierda, asombra por varios motivos