APUNTE

Un disparo y otra Champions

Vinicius JR. celebra el gol marcado al Liverpool durante el partido de la final de la Liga de Campeones disputado este sábado en el Estadio de Francia, en Saint-Denis.  / EFE/Juanjo Martín

El Real Madrid entregó la alineación muy pronto, cuando faltaban más de dos horas para el inicio de la final. Las cartas, boca arriba enseguida. Y llegó bastante antes que el Liverpool al estadio, casi con las manos en los bolsillos. Seis finales disputadas y ganadas en el siglo XXI (siete con la de ayer) proporcionaban al equipo blanco la serenidad con que se suelen acometer los actos rutinarios. Hasta entró al partido con calma, como permitiendo a los ingleses desgastarse con arremetidas de furia. Fue un meneo de los ‘reds’ en el primer tiempo y parte del segundo, pero sin goles. Es decir, la sensación de que la final se decantaría al final para los blancos se hizo inevitable. Lo hemos visto tantas veces...