Artículo de Núria Iceta Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Salir de 'Alcarràs'

La película de Carla Simón es un llamamiento a la familia, a la felicidad, a la fiesta, al trabajo cooperativo, a la esencia de lo que debería ser la vida en comunidad

La familia Solé, reunida a la mesa en una escena de ’Alcarràs’. / Avalon

Salir de las buenas películas cuesta mucho. La fuerza de los personajes, de las palabras y de los silencios de 'Alcarràs' es tal que me cuesta aplaudir. Estoy todavía bajo la brisa de un melocotonero cuando comienzan los títulos de crédito y buena parte de las 1.000 personas que llenan el cine Aribau de Barcelona estalla en aplausos. Cada uno gestiona las emociones como puede y de emociones va 'Alcarràs'. De emociones y relaciones, con la delicadeza firme del convencimiento que Carla Simón ya mostró en su primera película, 'Estiu 1993', hace cinco años.