La evolución de la pandemia

La séptima ola del covid y la vida en guardia

La distancia social y la higiene deberían quedarse con nosotros para siempre, pero una vida profiláctica procesa las emociones mal

Viandantes pasean por una calle del centro de Madrid, la semana pasada. EFE/ Juan Carlos Hidalgo

Mascarillas en ristre, colgadas del codo, o de la muñeca. Algunos las llevan bajo la barbilla, como a punto. A punto de entrar en un autobús, a punto de hablar con alguien vulnerable, a punto de ponérsela de nuevo si hace falta porque aún entramos en bares y tiendas con el mecanismo de alerta activado.