Ágora Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

¿Financiar el activismo crítico? Y tanto

Las entidades hacemos política, no partidismo y, a veces, esto significa criticar a quien nos financia

Ada Colau, durante un pleno municipal. / FERRAN NADEU

Este año se cumplen 50 años desde que Naciones Unidas recomendó a los Estados dedicar el 0,7% de su PIB a cooperación internacional. En una renovación de este llamamiento, las mismas Naciones Unidas plantean ahora el horizonte de 2030 para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. El Gobierno español acaba de anunciar que llegará al 0,7 en 2030. Mientras, el Govern catalán, por el contrario, da marcha atrás en este mismo compromiso, a pesar de que todas las encuestas de opinión confirman el apoyo mayoritario de la ciudadanía a aumentar los 5 euros por persona y año, que dedicamos. Desde que en 1994 el gran movimiento social de la solidaridad internacional impulsó, desde la calle y la movilización, estas políticas públicas, existe un consenso social mayoritario, y hoy todas las administraciones hacen cooperación. Los ayuntamientos han sido tan constantes en su compromiso que, hoy, el 50% del dinero público catalán dedicado a cooperación sale de aquí. El Ayuntamiento de Barcelona no solo tiene competencias, sino que desde el 'Districte 11' es una ciudad referente en el tema. Y lo es, sin duda, gracias también a su tejido asociativo, y al apoyo decidido que da, presupuestariamente.