Un episodio histórico determinante Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

¿Por qué nadie defendió Barcelona?

La derrota del Ebro y las luchas internas entre republicanos pesaron, pero se olvida a menudo, para explicar la desmoralización de una población que no levantó una sola barricada, que la ciudad fue sometida durante más de dos años a bombardeos sistemáticos

Un grupo de barcelonesas desfila con soldados del cuerpo marroquí por el paseo de Gràcia, el 27 de enero de 1939. / KAUTELA (ARCHIVO FAMILIAR MARTÍNEZ GASCÓN) / REST. V. LAHUERTA

En el exilio republicano, donde nací, esta era la pregunta de muchas sobremesas. ¿Por qué cayó Barcelona a manos de los franquistas, sin resistencia alguna, el 26 de enero de 1939? Los mayores le daban vueltas al tema y cruzaban acusaciones según sus afinidades. Los de Negrín responsabilizaban a Companys de no haberse tomado nunca la guerra en serio. Los de Esquerra Republicana atribuían el hundimiento del frente catalán a su exclusión de todo lo relacionado con la guerra por parte de Negrín y los comunistas. Los partidarios de Azaña atribuían la vergonzosa entrada de las tropas franquistas en Barcelona a que Stalin ya había sentenciado a la República española. En cuanto a los anarquistas y los del POUM, lo atribuían a una política equivocada que había maniatado la revolución proletaria. A lo que los comunistas respondían que las cosas hubieran ido de otra manera si no se hubiese perdido tanto tiempo en organizar un ejército como Dios manda. Las polémicas cainitas que habían diezmado al bando republicano seguían haciendo estragos entre los exiliados, que solo coincidían en una afirmación: la política de no intervención de Francia e Inglaterra había sido el talón de Aquiles de la República.