Pros y contras Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Y la lucha sigue

Los días de los abortos en Londres o en consultas médicas clandestinas no pueden volver. Al fin, es una lucha contra la desigualdad

Un grupo de estudiantes de la Universidad de Texas protestan contra la restrictiva ley del aborto que entró en vigor en el estado el pasado 1 de septiembre. / BOB DAEMMRICH /DPA

Emmanuel Macron propone incluir el derecho al aborto en la carta de los derechos de la UE. La defensa la realizó ante Roberta Metsola, flamante presidenta del Parlamento Europeo y reconocida antiabortista. El alegato de Macron tuvo claras intenciones electoralistas. Contradictorio, ya que su propio grupo ha apoyado a Metsola, pero no por ello irrelevante. Basta mirar a EEUU para corroborar que ninguno de los derechos adquiridos puede darse por consolidado. El veto al aborto sigue en pie en Texas y está en manos del Supremo que pueda extenderse a más estados. La ola populista conservadora cobra fuerza. La Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) ha iniciado una campaña en 33 ciudades de España con el lema ‘Rezar frente a una clínica abortista está genial’, con la que pretende alzar la voz contra la reforma que penaliza el acoso a las mujeres que van a abortar.